Más de 600 particulares se beneficiarán de las actuaciones que se están realizando en la Sierra de la Mosca catalogada como ‘Zona de Alto Riesgo de Incendios’
El alcalde de Cáceres, Luis Salaya, ha destacado la importancia de los trabajos preventivos que está llevando a cabo la Junta de Extremadura en la zona de la Sierra de la Mosca incluida en la catalogación de Zona de Alto Riesgo de Incendios, que están muy avanzados, ya que dará mayor seguridad a la vecindad y permitirá un mejor el tránsito de los vehículos y personal de extinción de incendios.
Salaya, que ha visitado la zona junto a la consejera de Agricultura, Desarrollo Rural, Población y Territorio, Begoña García, ha señalado que “es una actuación fundamental. Cuando llegué a la alcaldía hace casi 4 años uno de los primeros asuntos que más nos preocupaba era la situación de la Sierra de la Mosca, eran muchos años sin ninguna intervención y de un descuido total, lo que suponía un riesgo inmenso de incendios”.
En aquel momento, ha añadido, “me dirigí a la consejera para demandarle ayuda en las actuaciones. Ella, además de ratificar el riesgo que suponía la zona, insistía en que había que priorizar el tener vías claras para la salida de los vecinos en caso de incendio y vías que permitieran la entrada de vehículos de extinción para dar seguridad a la zona”.
El regidor municipal ha detallado que “se ha intervenido en propiedades de más de 600 particulares diferentes, lo que implica por un lado la proactividad de la administración que quiere intervenir y ayudar en base a la normativa que se aprobó en 2017, pero implica también una realidad como es el descuido de estas fincas por parte de muchos propietarios”.
Salaya ha hecho un llamamiento a los propietarios para que mantengan las fincas, “que intervengan ahora que todavía pueden de cara a la campaña de incendios, y que estas actuaciones no les generen una falsa sensación de seguridad, estas actuaciones sirven para poder actuar si hay incendios, pero lo que necesitamos es que los particulares actúen ya en sus fincas precisamente para evitarlos, con limpieza y mantenimiento”.
“Esta zona eran explotaciones tradicionales y familiares, y se han convertido en segundas residencias y residencias de verano, pero ello implica una serie de responsabilidades y tener que mantener las fincas, y es lo que pedimos a los particulares”, ha aseverado Salaya.
La actuación cuenta con más de 635.000 euros de presupuesto, cofinanciados por el Fondo Agrícola de Desarrollo Rural. Los objetivos que persiguen son mejorar la seguridad de los ciudadanos y la eficiencia en los servicios de extinción, y contribuir a preservar una zona de alto valor paisajístico, muy próxima a la ciudad. Se han limpiado restos vegetales que invaden caminos y áreas de olivares abandonados, y se están creando franjas de 8 metros como perímetro despejado de los viales; se están recuperando accesos a caminos y pistas, se construirán dos depósitos de agua y un puente para sortear el arroyo de Valhondo, como contempla el plan de actuaciones para la creación de la red preventiva frente a los incendios; y se ha asegurado el tránsito de vehículos y personal de extinción, se han abierto 2,5 km de camino, que eran tramos de enlace a caminos sin salidas.
